Soñando un lugar

   Unos días antes de que la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas informara de los nominados a los Goya 2019, me enteré que "Soñando un lugar" competía para llegar a la recta final, por desgracia no se coló entre los nominados. Me llamó la atención este documental porque trata sobre los pueblos españoles y muy especialmente de Torralba de Ribota, un pueblo pequeñito de Zaragoza al que le tengo gran cariño. Entre tú y yo, es el pueblo de mi padre. Ahora entenderás el interés, aunque he de reconocer que me gustan los documentales y creo que hay que dar visibilidad a este género. Le doy las gracias a Lucía por su generosidad y por haberme dado acceso al visionado de esta película documental. Tenemos pendiente conocernos en persona, solo hemos hablado por Facebook y por teléfono. A ver si a lo largo del 2019 paso por allí y disfruto del pueblo, de sus gentes y de todo lo que están aportando los "forasteros".


Ficha técnica
  • Título original: Soñando un lugar
  • Año: 2018  
  • Duración: 70 minutos. 
  • Director: Alfonso Kint.
  • Guión: Alfonso Kint. 
  • Música: Pascal Gaigne y Damián Peña Steffen.
  • Fotografía: Alfonso Kint. 
  • Género: Documental. 

¿De qué va?

   Lucía y Alfonso viven en Madrid y tras nacer su hija Greta, quieren dar un cambio a sus vidas, deciden mudarse a un pequeño pueblo de Zaragoza. A través de los vecinos, van descubriendo la situación tan delicada de este lugar y les motiva a reinventarse desde cero. Transmiten una visión diferente del presente de los pueblos y la apuesta por dejar la ciudad para comenzar a vivir de otra manera.

Soñando un lugar
Imagen de Filmaffinity.


¿Qué opino de "Soñando un lugar"?

   Es un documental interesante porque aunque es muy personal y está muy enfocado a un lugar concreto, pone de manifiesto una realidad que seguramente sea igual en otros pueblos españoles. Esta hecho con cariño, respeto y con algún momento gracioso. Hay alguna persona que aparece en él que ya no está, como es el caso del párroco del pueblo.

   Esta muy bien narrado, ya que nos pone en situación desde el momento en que sus protagonistas deciden emigrar de la ciudad al pueblo. Más de una persona pensará que están medio locos por dejar la ciudad y sus comodidades para irse a un pueblo de algo más de cien habitantes ¿qué les puede ofrecer a los protagonistas de esta historia un pueblo? Para comenzar una tranquilidad que las ciudades no proporcionan, aire más limpio, aprender nuevas cosas, conocer otras realidades y su pequeña tiene una libertad que en la ciudad no la tendría.

   Más allá de Lucía, Alfonso y Greta, los protagonistas son los propios lugareños del pueblo, los hijos que ya no viven allí pero que van los fines de semana, los puentes, en verano o en fiestas para gozar de aquel lugar, porque quien ha vivido la experiencia de pasar parte de su tiempo de vacaciones en un pueblo, sabe que no hay nada como eso, especialmente cuando eres niño y adolescente.

   Me ha encantado ver en el documental a amigos y amigas de mi niñez y mi adolescencia, así como a mi abuelilla. Es curioso, hace años que no voy por Torralba de Ribota pero me encanta conocer pueblecitos cuando veraneo. Hay dos olores que siempre me transportan allí, uno es el olor que desprende la tierra mojada tras una buena tormenta de verano y otro es el olor de la leña quemada.

   "Soñando un lugar" nos habla de las decisiones que toman las personas, reivindica la vida rural, habla de reinventarse, da un tirón de orejas a esos pueblos que parece que se mueren porque sus gentes se han ido a las ciudades y casi nadie labra la tierra pero como bien dice Lucía, ¿quién tiene la culpa de que los pueblos mueran? Gran parte de esa culpa la tienen sus gentes porque no ven más allá de SU PUEBLO, lo pongo en mayúsculas porque lo sienten suyo y a la vez no hacen nada para que venga gente a conocerlo y quererlo como ellos hacen. Hay que tener una mente más abierta, mostrar todo lo bueno que proporciona el pueblo y conseguir que la gente se interese por este pequeño pueblo, está claro que es posible.

   Desde mi punto de vista hay que dar las gracias a Lucía y a Alfonso porque ellos han llevado a Torralba de Ribota aire fresco y nuevas miras para que el corazón de este pueblo siga latiendo, así como otras familias nuevas que se han asentado allí.

   Termino como comencé, es un documental interesante, que habla de la despoblación rural, de cómo se puede dar un giro a esa situación si todo el mundo pone de su parte y te aconsejo verlo si te gustan los documentales y si quieres conocer un rinconcito precioso de la comarca de la Comunidad de Calatayud en Zaragoza.


Mi puntuación: 6/10 (Interesante)


Curiosidades

   Este documental ha sido rodado durante siete años.

   Se presento en la 63 edición de de la Seminci, el Festival de cine de Valladolid.

   Torralba de Ribota tenía censado 172 habitantes en el 2018.

   Cuentan con dos romerías, una a la Ermita de San Sebastián (20 de enero) y la otra a la Ermita de la Virgen de Cigüela (25 de marzo). Sus fiestas mayores son para el 1 de agosto con la festividad de San Félix, de esta fiesta en concreto voy a destacar el encierro del autobús, lo que oyes, no hay toros pero sí corren delante del autobús de línea unos cuantos metros a primera hora de la mañana como si fueran los San Fermines.

   Tienen un gran referente en lo que se refiere al arte mudéjar gracias a la iglesia de San Félix Mártir. Es una iglesia fortaleza de estilo gótico-cisterciense que fue acabada en el siglo XIII.
   
Torralba de Ribota (Zaragoza)


   Pueblos en Arte hizo posible la primera edición del Saltamontes Festival en julio del 2018, favoreciendo un acercamiento a la cultura y a que más gente conozca la zona a través de esta iniciativa. 

Tráiler de "Soñando un lugar".



¿Dejarías de vivir en la ciudad para vivir en un pueblo?

Recomendada para todos los públicos

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